Volver a empezar cueste lo que cueste

La historia de hoy es para las valientes emprendedoras, quienes desafían a la rutina maternal para emprender un nuevo viaje y volver empezar. Cada vez es más difícil elegir el momento perfecto para la maternidad. Aunque cada vez haya más métodos para programar y organizar nuestro debut como madres creo que lo más difícil es la decisión de "volver a ruedo". Doy fe que hasta que no hacemos contacto con nuestro bebe no podemos asegurar nuestro profundo deseo. Creo que no hay que temerle a maternidad porque eso nos potencia y nos hace ganar conciencia y perder el miedo a salir adelante como sea. Dar vida nos conecta con las ganas de generar y mientras nuestro bebe va creciendo, junto con ello se activa nuestro deseo por volver a ser independientes y buscar nuestra verdadera vocación.

Como madre primeriza me encontré con la enorme necesidad de volver a crear y producir, de generar un nuevo espacio para mi y volver a sentirme independiente. Mi trabajo me permitió combinar horas de maternidad con horas de trabajo pero tuve que tener mucho cuidado para cuidar ambas cosas. Cada cosa a su ritmo y en su lugar. Cuando somos independientes muchas veces nos tentamos e incorporamos al trabajo algunas cosas cotidianas pero en el equilibrio esta la eficacia. Muchas pero muchas más veces seremos exitosas en nuestro trabajo y en nuestra maternidad si sabemos elegir y separar  cada cosa sin perder el eje. Hoy hay muchas maneras de emprender, Home office llevando el trabajo a casa, transformar nuestra casa en una fábrica para hacer nuestro producto, guarderías en empresas o empresas que se transforman en guarderías. Para mi valen todas y cada una de estas opciones nos pueden acompañar en cada etapa. 

Con mi primer hijo crecí y emprendí el desafío de la conducción, las cámaras fueron mi gran liberación. Combine mi vocación por la producción con la alegría de conducir un show.

Que desafío ese día que dejas por primera vez a tu bebe y cuanta adrenalina pero que linda sensación, ese primer viaje en auto o en colectivo cuando volvimos a empezar para volver a probar ese gustito de independencia.

Hoy conozco muchas mujeres que encontraron su vocación después de ser madres o se animaron a sincerarse para decidir sobre el verdadero y tan valioso futuro laboral, que en definitiva nos tiene que acompañar. Lo más importante es ser exitosas y proyectar, sin perder el rumbo para cuidar de nuestra tan valiosa actualidad. 

Animarse y crecer para volver a empezar!

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